Hay algunos que, con el paso de los años, empiezan a descubrir sus vergüenzas.
Y, así, mientras que unos se dedican a salir del armario,otros, por el contrario, optan por volver al mismo, aunque, eso sí, disfrazados de "demócratas de toda la vida".
Dicen los psiquiatras que cuando uno está continuamente rememorando un tiempo determinado, es porque, bien ha recibido un trauma, bien porque, en el fondo, por efecto del "Síndrome de Estocolmo", acaba por amar desesperada e impulsivamente, a su verdugo.
Por ello, cuando estamos asistiendo a una contínua y hasta cansina evocación de la figura del General Franco, al que, parece ser, hay que echar culpa de todos los males actuales y, sobre todo, de los que se avecinan, a uno le empieza a asaltar la duda de si, en el fondo, y en la superficie, aquéllos que tanto lo mentan, en realidad, como invertidos que son, lo que, en definitiva, están insinuando es que lo echan de menos.
O dicho en román paladino: que están enamorados del Caudillo.
Y yo, que nunca he sido franquista, y mucho menos maricón, me asalta la duda de si, en realidad, más que de Franco y de su Régimen, la culpa pudo haber sido del "cha, cha, cha......."
Francisco Pena
Y, así, mientras que unos se dedican a salir del armario,otros, por el contrario, optan por volver al mismo, aunque, eso sí, disfrazados de "demócratas de toda la vida".
Dicen los psiquiatras que cuando uno está continuamente rememorando un tiempo determinado, es porque, bien ha recibido un trauma, bien porque, en el fondo, por efecto del "Síndrome de Estocolmo", acaba por amar desesperada e impulsivamente, a su verdugo.
Por ello, cuando estamos asistiendo a una contínua y hasta cansina evocación de la figura del General Franco, al que, parece ser, hay que echar culpa de todos los males actuales y, sobre todo, de los que se avecinan, a uno le empieza a asaltar la duda de si, en el fondo, y en la superficie, aquéllos que tanto lo mentan, en realidad, como invertidos que son, lo que, en definitiva, están insinuando es que lo echan de menos.
O dicho en román paladino: que están enamorados del Caudillo.
Y yo, que nunca he sido franquista, y mucho menos maricón, me asalta la duda de si, en realidad, más que de Franco y de su Régimen, la culpa pudo haber sido del "cha, cha, cha......."
Francisco Pena
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