Por una vez, y sin que sirva de precedente, voy a utilizar esta página para manifestarme sobre un hecho gravísimo que está ocurriendo en la cobertura de los asuntos del turno de oficio.
La única responsable es la Consellería de Xusticia, porque, amén de haberse quedado con parte del dinero que le corresponde a los letrados de oficio, dinero que, hasta la fecha, no ha abonado, lo cierto es que tales "indemnizaciones", que no retribuciones, son una burla, no sólo para la profesión, sino, y fundamentalmente, para los propios defendidos, porque en muy poco se valora su situación.
Es así un deber de la Consellería garantizar la asistencia jurídica a las personas que carecen de recursos para sufragar los gastos que genera una defensa jurídica, pues, no lo olvidemos, no es un deber por parte de los Letrados, que han de limitarse a ejercer una profesión liberal, suplir las gravísimas deficiencias y carencias de ésta nuestra "maravillosa" Justicia que nos venden.
Debemos negarnos a ser mano de obra barata y brazo ejecutor de la insidia pailano-caciquil del Sr. Conselleiro y sus secuaces.
Si quieren servir como se debe, es inexcusable la creación de un servicio público de asistencia letrada.
Un servicio público constituido por auténticos profesionales de la abogacía, profesionales que perciban un salario digno por el trabajo efectivamente realizado.
Un servicio, asimismo, que paralelamente garantice una efectiva y eficaz defensa jurídica a los administrados que REALMENTE la necesiten.
Es por ello que no entiendo a ciertos colegas que aceptan cualquier componenda con tal de no "alterar" el buen funcionamiento del servicio de asistencia jurídica, cuando, precisamente, si lo que se pretende es garantizar una auténtica y efectiva asistencia al administrado, lo que hay que exigir, que no suplicar, es la realización de un auténtico servicio público y profesional.
Sólo cuando esa mierda de servicio que, por ahora, se ofrece por parte de la Consellería de Xusticia se vea, efectivamente, paralizado, estancado, será cuando se tomarán las inexcusables y efectivas medidas para garantizar un servicio público de calidad.
Es por ello que abogo por la paralización total y sin excepciones de cualquier servicio de asistencia jurídica, porque es la única forma de colapsar un servicio, de por sí, ya fenecido.
Cualquier otra medida alternativa, tal y como es la ambigua actualmente en vigor no deja de ser, con perdón, una mariconada.
No engañemos a lo ciudadanos: aquí la única responsable es la Administración, no los Letrados, que bastante hacen con realizar un loable y poco agradecido servicio a cambio de una mísera "indemnización".
Francisco Pena
No hay comentarios:
Publicar un comentario