Es menester informar a los promotores-inductores y, en su caso, autores materiales, ya mediatos o inmediatos, que muchos no vamos a permanecer impasibles y, si es necesario, actuaremos con la diligencia y eficacia debida, aunque el resultado de éstas pueda superar las expectativas previsibles y deseables.
Si es necesario, en defensa de la Fe y de nuestras Familias, optaremos por las medidas expeditivas que, en justa reciprocidad y efectividad, puedan, primero, frenar el avance de los ataques y, en segundo lugar, alcanzar o conseguir el justo resarcimiento de los daños personales, materiales y morales efectivamente causados.
No dudamos quién o quiénes están detrás de tales agresiones, al igual que no dudamos de que éstos pagarán con creces sus crímenes, tarde o temprano.
Esperamos que se midan las palabras aquí vertidas porque no queremos provocar equívocos....
No será por no advertirlo....
Frente a la agresión, si duda.....
¡RESISTENCIA ARMADA!
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